Comparando con laptops y computadoras de escritorio, las tabletas y los Smartphones son más asegurados y limitados cuando se habla de su uso. Por eso, se inventaron los famosos Jailbreak, Root y Unlock para poder rebasar esa seguridad y hacer lo que el fabricante del dispositivo no quiere que hagas.

1. Jailbreaking

El Jailbreak es eliminar las limitaciones que pone el fabricante en su dispositivo móvil. Y es el más utilizado precisamente en los productos de Apple como iPhone y iPad por ejemplo, ya que te permite instalar aplicaciones de terceros (Third Party Apps) sin tener que acceder a Apple Store. También te permite cambiar algunas características como el navegador  predeterminado (default browser); pero lo más importante es que el Jailbreak te permite instalar aplicaciones de paga de forma gratuita sin la autorización de Apple.

El Jailbreak también está disponible para las tabletas de Microsoft (Surface RT) y te permite instalar aplicaciones que no son para este tipo de dispositivos ya que originalmente el sistema Surface RT solo acepta aquellas aplicaciones certificadas por Microsoft.

Los dispositivos Android no necesitan Jailbreak ya que te permiten instalar aplicaciones desde afuera de Google Play.

2. Rooting

El Root es obtener los permisos del administrador de algún dispositivo. En general, eso se utiliza con frecuencia en los aparatos operados por Android pero también en aquellos operados con Linux o Unix como el sistema operativo anterior de Nokia, Symbian.

Básicamente, el Rooting te permite eliminar las aplicaciones predeterminadas del sistema, ejecutar algunas otras que necesitan permisos especiales, etc...

El punto negativo del Rooting es que si el usuario no sabe lo que está haciendo, podría terminar borrando alguna aplicación importante del sistema operativo, lo que podría causar la destrucción del mismo.

Después de aplicar el Root a tu dispositivo, pierdes la garantía del mismo.

3. Unlocking

Algunos teléfonos celulares y especialmente aquellos patrocinados por empresas de telecomunicaciones vienen cerrados, o mejor dicho, solo aceptan tarjetas SIM de esa compañía. Así que cuando intentas meterles un "chip" de otra empresa simplemente no lo detectan.

El Unlock te permite utilizar cualquier tarjeta SIM  en el dispositivo en el cual se aplica esa técnica. En otras palabras, si tienes un teléfono que se le aplicó un Unlock, podrás cambiar de compañía en cualquier momento guardando el mismo celular.

Con diferencia a las dos primeras técnicas, el Unlocking no es sujeto a un sistema en particular y puede ser aplicado en cualquier dispositivo.

NOTA: Algunos países no permiten utilizar ninguna técnica de las anteriores y toman acciones muy severas en contra de sus usuarios. Se recomienda discreción.